Y en ese momento, en ese mismo minuto. Me hubiera gustado mirarla a la cara... fijamente a los ojos verdes y bonitos que tiene y haberle dicho que la quería, que ella era mi vida y que sin ella no podría pasar el resto de mi vida. Pero no tuve suficiente valor... y las oportunidades pasan, sí. Pero siempre queda la esperanza de que vendrán otras nuevas... y esas no las desperdiciaré. Lo juro.
Sí, porque más vale tarde que nunca. Así que como tú dices, no desperdicies las siguientes oportunidades, que seguro que tendrás =)
ResponderEliminarUn saludo :)